El proceso de acompañamiento de
Según la ley No1014 de 2005 la función de los emprendedores es reformar, o revolucionar el patrón de la producción al explotar una invención o más comúnmente una posibilidad técnica no aprobada, para producir un nuevo producto o uno viejo de una nueva manera; o proveer de una nueva fuente de insumos o un material nuevo; o reorganizar una industria. La función emprendedora no consiste esencialmente en inventar algo o en crear las condiciones en las cuales la empresa puede explotar lo innovador; consiste básicamente en conseguir que las cosas se hagan.
Se procede a una etapa de preincubación, en donde se acompaña al emprendedor en el desarrollo del Plan de Negocios orientado a simplificar procesos en la región y adecuarlos a la toma de decisiones de los inversionistas y del sector financiero después de un previo estudio de factibilidad. En el proceso de adquirir financiamiento, se promueve mecanismos de estructuración financiera tales como capital semilla, capital de riesgo, préstamos, financiación e inversionistas. Ya en la etapa de Incubación, se empieza a consolidar la empresa con equipo de trabajo, productos o servicios y clientes tratando de operar en un mercado natural.
En esta etapa se puede aplicar a las diversas convocatorias a nivel local, nacional o internacional para la obtención de recursos. Entre estas convocatorias se encuentran Ley 344/96 que apoya proyectos innovadores, de desarrollo tecnológico y productivo en las Regiones y el Fondo Emprender, que apoya proyectos liderados por alumnos del SENA o estudiantes universitarios o recién egresados, con el fin de proporcionarles capital semilla.
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